Poco después de las 15 horas, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, llegó a la estación del Tren Maya, acompañado por la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, para realizar desde Cancún el primer viaje del tren P’atal, palabra maya que significa Permanecer, el que podría considerarse el tren de lujo, al contar con dormitorios y restaurantes.
Este es el primero de su tipo que entrega la empresa Alstom México. Está habilitado para que los pasajeros puedan dormir durante la jornada, ya que los asientos se convierten en una cama. Fue diseñado con ocho vagones para viajes largos, por lo que contará con camarotes y además tiene restaurantes y facilidades para personas con movilidad reducida.
A bordo también subió la gobernadora de Quintana Roo, Mara Lezama Espinosa, entre otros mandatarios como los de Campeche, Chiapas, Veracruz, Estado de México, Guerrero y Tabasco, y autoridades de los tres niveles de gobierno.
Este tren modificó sus colores respecto a los otros diseños, luciendo un verde más oscuro con tonalidades doradas. A su arribo, el presidente saludó a decenas de personas lo esperaban desde el mediodía para saludarlo e incluso algunos con algún regalo o su libro para que se los firmara, a lo que él accedió.
Alrededor de las 17 horas, el presidente y su comitiva arribaron a la estación de Chichén Itzá, donde inaugurarán uno de los hoteles de la ruta del Tren Maya, ubicado en las inmediaciones de esa zona arqueológica; posteriormente irán a Mérida Teya, para mañana sábado emprender rumbo a Oaxaca, donde los presidentes entrante y saliente encabezarán otros actos de la agenda conjunta del fin de semana.
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