En solo mes y medio, en Quintana Roo se pusieron en operación tres mil 294 unidades más de renta vacacional, que casi equipara el número de los nuevos cuartos hoteleros que se pretenden construir en el estado durante todo el 2024, estimado entre tres mil y cinco mil habitaciones.
De acuerdo con la Secretaría de Turismo de Quintana Roo, con corte al 16 de febrero, en la entidad se contabilizó un total de 44 mil 263 unidades de rentas, con ocupaciones promedio de 50%, y tarifas promedio de dos mil 800 pesos. Al cierre de 2023, se contabilizaron un total de 40 mil 969 unidades en los 11 municipios.
Playa del Carmen reporta el mayor número de las rentas vacacionales con 14 mil 141; el alza en el número de unidades está estimado en un 3%.
La ciudad de Cancún cuenta con 12 mil 248 unidades, con un alza de 12% de la oferta; mientras que Tulum sumó un total de 10 mil 986, un incremento de 12%. Estos dos son los que tienen el incremento más alto.
Todos los demás municipios, con excepción de Felipe Carrillo Puerto, reportaron un incremento en este tipo de alojamientos. En Carrillo Puerto, la Sedetur reporta un total de 12 unidades identificadas.
Apenas esta semana fue aprobada en Quintana Roo una reforma a la Ley de Turismo, con la finalidad de poner en orden esta actividad y lograr que todos los inmuebles que son utilizados para vender alojamientos a través de plataformas digitales estén registrados, paguen los impuestos federales y estatales y sobre todo que sean lugares seguros.
Francisco Madrid Flores, director de la Sustainable Tourism Advanced Research Center, destacó que actualmente trabajan en un estudio sobre el comportamiento de este sector, durante el 2023, el cual esperan que abone al análisis del ordenamiento de este fenómeno de hospedaje.
“Creemos que la cancha sigue dispareja en este terreno, pero con el estudio vamos a tener un panorama que ayude a determinar las acciones que le tocarán a las autoridades”, explicó.
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