En Quintana Roo más de 400 guarderías para mascotas, lugares donde cuidan a perros y gatos mientras sus dueños están de viaje.
Sin embargo, cerca de la mitad se encuentran reguladas, lo que ha provocado que algunas sean dirigidas por personas sin capacitación, causando la muerte de algunas mascotas.
El caso más reciente sucedió en Chetumal, donde Estaban Mera Villanueva denunció que en la estancia “A Pata Suelta”, asesinaron a su perro, a menos de dos días de habérselos dejado.
Citó que el personal de la estancia se desatendió del caso, argumentando que murió por un golpe de calor en el camino cuando su amigo se lo llevó. Después bloquearon su número y dejaron de contestarle.
De acuerdo a la organización “Patitas Felices A.C.”, en Quintana Roo se ha registrado la muerte de cerca de 200 mascotas en el último año en estas estancias.
Estos lugares se han vuelto de moda entre las personas jóvenes, debido a que cada vez es más común que prefieran tener perros o gatos, en lugar de hijos, dándoles cuidados especiales.
Se trata de un problema reciente, ni las autoridades ni los denunciantes tienen conocimiento del protocolo para presentar y dar seguimiento a estas denuncias, pues en muchos casos no saben si clasificarlo como maltrato animal o daño a la propiedad.
La organización recomienda que antes de dejar a sus mascotas, averigüen si la estancia cuenta con los permisos correspondientes.
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